
Los civiles, bajo los disparos de la artillería, estarían huyendo en la parte meridional de Mullaivaikal, bloqueando todas las carreteras. No existen fuentes independientes en el campo que puedan confirmar las informaciones de una y otra parte, y los trabajadores humanitarios están preocupados que en las zonas de combates, de donde en la última semana consiguieron huir más de 111.000 personas, todavía sigan 50.000 civiles. Según cálculos no oficiales de la ONU, obtenidos de un documento secreto que fue pasado a la prensa, durante la semana pasada unos 6.500 civiles fueron asesinados y pocos menos de 15.000 quedaron heridos. Ayer el sub-secretario general de Asuntos Humanitarios John Holmes, quien volvió de Vavunyia para visitar a los campamentos de evacuados con civiles tamil, había acogido con favor al anuncio del gobierno sobre una disminución de las operaciones de combate. “El punto fundamental –había comentado Holmes- es la completa implementación de lo anunciado” y expresó una gran preocupación debido a las informaciones según las que los combates estarían siguiendo”.