República Democrática del Congo. Nuevas esperanzas de paz atraviesan el este de la República Democrática del Congo, y en particular la provincia de Kivu del Norte, pero es fundamental consolidar y mejorar los resultados alcanzados. Es lo que dicen algunas de las declaraciones realizadas ayer por algunos representantes de la ONU y la Unión Africana (UA). Al término de un viaje a Kinshasa, Kigali y Nairobi, los ‘enviados especiales’ de las Naciones Unidas y de la UA para Kivu del Norte Olusegun Obasanjo y Benjamin Mpaka destacaron la necesidad de “llevar adelante” una gran confrontación política “en vista de una paz verdadera y definitiva que pueda poner de manera estable a la región de los Grandes Lagos en el camino de un desarrollo social duradero”. Esperanzas, pero también obstáculos y dificultades son el punto clave de un informe presentado al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas por Alan Doss, el ‘enviado especial’ de la ONU para la República Democrática del Congo. El diplomático destacó la importancia del acuerdo de paz firmado el 23 de marzo entre el gobierno de Kinshasa y el Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP), uno de los principales grupos armados de Kivu del Norte, y sobre todo señaló la importancia de una aproximación político-diplomática entre Congo y Ruanda. “Hoy –sostuvo Doss- existe de verdad la esperanza de lograr una solución estable para los problemas que afligieron a esta región por más de 10 años”. Sin embargo, según el funcionario de la ONU, para estabilizar al este del Congo y contrarrestar a los grupos activos en la región, se debe reforzar la misión de las tropas de paz de las Naciones Unidas. La MONUC, según Doss, debería disponer de al menos 18 nuevos helicópteros y de los 300 ‘cascos azules’ de refuerzo prometidos por el Consejo de Seguridad con una resolución aprobada en noviembre.16 de abril de 2009
KIVU DEL NORTE: MEDIADORES DESTACAN PROGRESOS Y DIFICULTADES PARA LA PAZ
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República Democrática del Congo. Nuevas esperanzas de paz atraviesan el este de la República Democrática del Congo, y en particular la provincia de Kivu del Norte, pero es fundamental consolidar y mejorar los resultados alcanzados. Es lo que dicen algunas de las declaraciones realizadas ayer por algunos representantes de la ONU y la Unión Africana (UA). Al término de un viaje a Kinshasa, Kigali y Nairobi, los ‘enviados especiales’ de las Naciones Unidas y de la UA para Kivu del Norte Olusegun Obasanjo y Benjamin Mpaka destacaron la necesidad de “llevar adelante” una gran confrontación política “en vista de una paz verdadera y definitiva que pueda poner de manera estable a la región de los Grandes Lagos en el camino de un desarrollo social duradero”. Esperanzas, pero también obstáculos y dificultades son el punto clave de un informe presentado al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas por Alan Doss, el ‘enviado especial’ de la ONU para la República Democrática del Congo. El diplomático destacó la importancia del acuerdo de paz firmado el 23 de marzo entre el gobierno de Kinshasa y el Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP), uno de los principales grupos armados de Kivu del Norte, y sobre todo señaló la importancia de una aproximación político-diplomática entre Congo y Ruanda. “Hoy –sostuvo Doss- existe de verdad la esperanza de lograr una solución estable para los problemas que afligieron a esta región por más de 10 años”. Sin embargo, según el funcionario de la ONU, para estabilizar al este del Congo y contrarrestar a los grupos activos en la región, se debe reforzar la misión de las tropas de paz de las Naciones Unidas. La MONUC, según Doss, debería disponer de al menos 18 nuevos helicópteros y de los 300 ‘cascos azules’ de refuerzo prometidos por el Consejo de Seguridad con una resolución aprobada en noviembre.
