29 de marzo de 2020

DOMINGO IV DE CUARESMA

Por
29 de marzo de 2020

Domingo IV de Cuaresma
15° de confinamiento

Acabamos un domingo más, pero no uno cualquiera, es nuestro segundo domingo confinados, atrapados en una situación no buscada y en que lo heroico es permanecer y perseverar en la intimidad; un segundo domingo de confinamiento en que lo que era impensable hace no tanto tiempo se va haciendo rutina y en que la necesidad de vivir se va arraigando más que nunca entre nuestros miedos y sufrimientos que parecieron instalarse alevosamente y con fuerza cuando todo ésto dio a su comienzo... ¡Curiosa Cuaresma que nos hace viajar a lo más recóndito del alma para reconciliarnos con nosotros mismos y encaminarnos con paso firme a la vida plena, resucitada y resucitadora! Hoy es la vida la que celebramos, cada segundo, cada minuto, cada hora... En todo momento estamos llamados a vivir en plenitud, como magnífico pórtico de entrada a la eternidad divina que es la meta hacia la que nos encaminamos y que hemos de vivir en nuestro día a día... ¡Y ahora más unidos que nunca!, conscientes de la complementariedad que nos enriquece y nos hace más imagen del Dios de la VIDA, del Dios del amor... ¡Y vemos cómo todo es vida en Solo Dios! Desde los segundos interminables del tedio mal llevado, hasta en la levedad de los momentos de solaz y alegría, pasando incluso por los tensos y agónicos momentos que parecen pasar más lentos de lo que quisiéramos... Todo es vida, y por todo hemos de agradecer!
Hoy contemplamos el misterio de la vida que triunfa sobre la muerte y cómo la muerte tanto más valor tiene cuanto más permitimos que nos robe vida. Está claro que no estaremos aquí ni un segundo más de lo que nos toca vivir, pero aún así el miedo nos ensombrece y hace que la vida nos quede mutilada... Como enfermos nos arrastramos enquistados en nuestro lamento y dejamos poco espacio a la confianza en Dios... Cómo pasó en Betania ante los enrojecidos ojos de los que lloraban al bueno de Lázaro... Aquellas lágrimas desoladoras ocultaron las lágrimas del mismo Jesús que sufriendo con aquellos amigos suyos la muerte del amigo amado quiso mostrar aún así que para él nada es imposible y que la muerte en él no manda.
Quizá nosotros estemos no ya en las actitudes de rencor, recelo y reproche de la multitud de Betania sino en la posición de Lázaro... Muertos en vida! Ante esto, ante esta situación podemos caer en el estéril derrotismo o dejarnos en la presencia de Dios, de su amor y de su vida... "A ti te lo digo! Sal de la tumba y vive!"
Hoy necesitamos salir de la tumba sórdida y traidora y vivir sin ambage, superando esta cárcel que limita y nos humilla... dejando libre el alma que busca a su Dios, y a Dios en los hermanos y su creación! Seremos pues capaces de buscar la libertad? Nuestra libertad? La libertad verdadera? Nos atreveremos a ser plenamente libres, plenamente vivos, enraizados en amor que se entrega? Cómo romper tanta cadena inútil y ruin que nos ata a lo que no es vida?
Sólo en amor verdadero (el que se parte y reparte) hallaremos vida y libertad.

Vuestro: Rv. Sr. D. Félix Élez Talaván - Pbo. S.F.B
Diócesis de Plasencia

25 años de asociado

25 años de asociado

Último compromiso Pozuelo julio 2019

Último compromiso Pozuelo julio 2019

Imagen en la Isla

Imagen en la Isla

MONASTERIO de OTEIZA

MONASTERIO de OTEIZA
Horarios de Eucaristías: días laborables a las 7,50 h. y Domingos y festivos a las 10,30 horas

Archivo de entradas